La cuenta atrás ya ha comenzado. En la #OTGala11 hemos vivido un auténtico espectáculo digno de una final, y es que ya queda menos para completar el ranking de los finalistas definitivos, y los concursantes están dispuestos a darlo todo.
Tras un duro duelo entre los nominados, la canaria, consiguió que el público se decantara por ella ante Roi, aunque la decisión era muy difícil llegados a estas alturas del programa, hecho que se reflejó en los votos, un ajustado 51% fue el que marcó la decisión final.
Roi tuvo que decir adiós a sus compañeros, en una gala en la que todos consiguieron destacar, una gala que marcó el inicio de una final ya anunciada que proclamó a 4 de los concursantes como finalistas definitivos del concurso.
Ana defendió bastante bien su tema «Por debajo de la mesa». Una balada muy complicada, con la que consiguió emocionar y transmitir muchos sentimientos. A pesar de ser una de las concursantes que más evolución ha tenido dentro del concurso, fue la que menos votos recibió en la noche.
Alfred destacó como nunca. Por fin consiguió exprimir al máximo todas las técnicas y consejos de los profesores. Demostró una gran soltura en el escenario, manteniendo siempre su sello propio, que lo caracteriza como artista. Fue uno de los grandes alabados de la noche.
Si Aitana nos tenía acostumbrados a derrochar fuerza, juventud y desenfreno, ayer nos pudo demostrar que su versatilidad va mucho más allá. Sentimiento puro, emoción a flor de piel y un desgarre de corazón es lo que por fin expresó con «Procuro olvidarte». Aunque aún sigue teniendo muchas inseguridades encima del escenario, con este tema demostró una gran soltura, con el que se le vio muy cómoda.
Agoney montó el gran show de la noche, sin duda alguna contaba con una gran ayuda, y es que el equipo de baile hizo que la unión entre la coreografía, los atrezos empleados y la voz del canario congeniaran a la perfección. Un número con el que todos coreaban «Agoney a eurovisión». Estuvo muy bien, pero no olvidemos que eurovisión es mucho más que un juego encadenado de telas y coreografía, habrá que esperar para conocer los temas de todos los candidatos.
Miriam se olvidó del vibrato, del jurado y vivió como nunca su actuación e interpretación de «What About Us». Bailó, saltó y disfrutó, y consiguió transmitirlo, tanto que las votaciones del jurado la colocaron en el top 3 para convertirse en finalista.
Amaia ya nos tenía acostumbrados a su lado más tierno, el más rockero… Si le quedaba algún filtro era el sensual, el sexy, y ayer revolucionó a todo el plató con «Love on the braian». Ha sido la única alumna que nunca ha estado nominada, y la única en recibir un pleno 10 por parte de todo el jurado.
En las votaciones los concursantes que recibieron mayor puntuación por parte del jurado, y que por lo tanto conseguían el pase directo a la final fueron; Amaia, Miriam y Alfred.
Los profesores tuvieron el complicado papel de tener que elegir entre Ana Guerra, Agoney o Aitana el cuarto finalista. Definitivamente dieron el puesto seguro de finalista a Aitana.
Por lo tanto la semana que viene tendremos que elegir el último concursante que se unirá como finalista al resto de sus compañeros.
Ana Guerra o Agoney, ¡tu decides!
¿Quién quieres que sea el 5º finalista de #OT2017?
ASÍ SERÁ LA MECÁNICA DE LA FINAL:
Todos tendrán el privilegio de escoger las canciones que le gustarían representar el gran día de la final. Tras ser valorado por los profesores de la academia, se asignarán en función de la similitud de géneros que hayan elegido todos.
Una vez defendidos estos temas, se abren los teléfonos para votar al ganador. Los dos con menos votos recibidos se quedarán a las puertas del gran triunfo. Ya solo quedarán los tres finalistas, que volverán a cantar las canciones que representaron en la #GALA0 de OT. Cuando finalicen se volverán a abrir los teléfonos y ya se elegirá al ganador.
El martes 23 de enero conoceremos los temas asignados a cada uno para el especial programa que elegirá el representante de eurovisión.
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Sin duda Agoney tiene mejor voz y sabemos la ilusión verdadera que tiene por poder representar a España en Eurovisión, sin embargo OT a parte de ser un concurso, es una academia y como tal, es indiscutible la gran evolución de Ana Guerra a pesar de que aún le falta mucho que mejorar. Quizá Agoney ha tenido un exceso de seguridad en sí mismo y hemos visto semana tras semana, en cada gala un atascamiento hasta tal punto de parecernos cada actuación igual, sin sorpresas. Habrá aprendido mucho pero no hemos podido ver un cambio gradual y/o radical como si ha pasado con otros concursantes y entre ellos está Ana Guerra, que a pesar de tener canciones difíciles, en otros idiomas, canciones quizá no muy populares o actuales e incluso canciones con ritmo o estilo muy arriesgado ha sabido sacarlo satisfactoriamente, en ocasiones lo bordó e incluso ha sabido crear espectáculo, movilizar a todo el público, a todas las redes sociales y disfrutar a pesar de no contar con la mejor arma que tienen sus compañeros, como Amaia que es sin duda la voz.
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