Hola!
Como sabéis, ya he podido tachar como «visitado» uno de mis destinos soñados. Por fin he podido visitar Marrakech.
Encontrar tanto el vuelo como el Riad donde me alojaria, fue uno de los procesos más rápidos, previos al inicio de la aventura. Ya sabéis que la relación calidad-precio para este tipo de destinos es impresionante, y las posibilidades son infinitas. El Riad donde me alojé es el: Riad Kenzo. Un lugar discreto, con unos anfitriones inmejorables, habitaciones en muy buen estado, clásico y muy tranquilo. Os dejo algunas fotos por aquí:
Su ubicación era perfecta, por lo que no tuve ningún tipo de problema a la hora de desplazarme para hacer las visitas obligadas de la ciudad. Cuando viajo lo que más me gusta es perderme por sus calles, y aquí tendrás multitud de opciones para hacerlo, pero ¡cuidado!, aqui todo es a cambio de dinero, y si te pierdes y te ayudan a regresar, no te quedará otra que pagar.
Mi viaje lo organicé para un sólo fin de semana, por lo que solo pude recorrer el sur del país. Tengo que reconocer, que después de mi experiencia, más de un fin de semana, me habría agobiado muchísimo. Vengo enamorado de esta ciudad imperial de Marruecos, pero las costumbres de todos los que trabajan en los comercios, y su «insistencias» con los turistas, ha sido una de las cosas que más me han estresado. Llegaba al Riad más cansado de esquivar a la gente, que de andar.
El primer día, lo aproveché para recorrer sus calles, y visitar las zonas que quedaban más alejadas del alojamiento, para contemplar todo lo que había en su camino. El «Jardin Majorelle» fue uno de los primeros lugares que visité, y de los que más me enamoré. Estos jardines son de ensueño. Un jardín botánico con una vegetación muy variada; cactus, nenúfares, palmeras, jazmines… ¡es precioso!
Le Jardin Secret, Madraza de Ben Youssef, Plaza de Yamaa el Fna, Mezquita Kutubía, Palacio de la Bahía, Palacio El Badi, Tumbas saadíes, y Bag Agnaou son algunos de los lugares de mayor interés turístico que no puedes irte sin ver.
Aunque la ruta la llevábamos más o menos organizada, uno de los días teníamos reservado un free tour, que aunque no tuvimos mucha suerte con el guía, nos dio la oportunidad de conocer a otras españolas con las que pudimos pasar el día, comer juntos y pasar un agradable atardecer en la Plaza de Yamaa el Fna, compartiendo risas, anécdotas e impresiones de nuestro día en Marrakech.
¿Dónde cambiar dinero?
El mejor lugar para el cambio de dinero está en el «Hotel Ali»
El contraste del estilo de vida, es lo que más me llamó la atención. Sus costumbres, sus «normas», la manera de conducir; esquivar motos, bicicletas o burros sin que te atropellen… Dentro del «caos» que hay en la ciudad, me llamó mucho la atención la seguridad y el cuidado que hay hacia los turistas. Aunque es verdad que su constante insistencia llega a intimidar y a veces resulta hasta bastante «violento».
Y tú, ¿ya has estado en Marrakech? Cuéntame que fue lo que más te gustó.
Os dejo más fotos de mi viaje por aquí:
Un comentario en “¡Mi viaje a Marrakech!”